martes, 12 de noviembre de 2013

Banderín de Camino. Hermandad de Nuestra Señora del Rocío. Madrid - Moratalaz

Banderín de Camino para la Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Moratalaz, Madrid. En la parte delantera presenta el escudo de la Hermandad, en grandes proporciones, con la Virgen pintada en acrílico sobre tabla por el Hermano D. Luis Asensio de Luis. 
La decoración de la parte delantera se distribuye en dos motivos asimétricos, uno inferior mas pequeño y otro superior, de mayor tamaño, en lo que se alternan las hojas con flores de diferentes tipos. Para el bordado de todo el banderín se ha empleado oro entrefino en diferentes tipos de hilo, practicándose las puntadas de setillo, onda, onda doble, media onda, taqueado, rombo, dado y cartulina.  














Las diferentes flores, así como el baldaquino están bordados en oro matizado con seda de colores. La inscripción y las hojas de laurel están realizadas con la técnica de Milané. A continuación mostramos algunos detalles del proceso de bordado de las piezas en pequeños bastidores. 








La parte trasera del banderín sigue un diseño simétrico en el que partiendo de una gran revolución de hojas salen diferentes tallos y flores, bordado todo ello a realce y con matizados de seda de colores. 










A continuación mostramos el bordado de dos hojas de la trasera en proceso de bordado, una de ellas en taqueado con canutillo, y la otra en onda con hojilla. 



Banderín de Camino bordado en hilo de oro entrefino sobre terciopelo verde.
Hermandad de Nuestra Señora del Rocío. Madrid-Moratalaz
Taller de bordado Hermanos Labanda Urbano, 2012-2013

domingo, 13 de octubre de 2013

Cubre-Llamador para el Paso de El Expolio. Cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno


Cubre llamador para el Paso de El Expolio, de la Cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno, de León.
Está realizado en bordado de recorte y a cordón tendido sobre terciopelo de Munich morado cardenal. En el centro figura, enmarcada por la corona de espinas del Emblema de la Cofradía, la bandera distintiva del paso. 

Debido a que popularmente esta Imagen se conoce como "El Torero", el diseño es de un bordado torero en el que destacan en el centro de las flores, piezas de cristal de Swarosky.





Cofradia del Dulce Nombre de Jesús Nazareno
Taller Hermanos Labanda Urbano. 2013

Medallón Heráldico como soporte de Crucificado



Encuadramiento como medallón heráldico para un Cristo Crucificado bordado a realce de oro entrefino y sedas de colores sobre terciopelo verde y tisú de plata salmón. El diseño de la cruz está inspirado en la cruz que porta Nuestro Padre Jesús Nazareno de León en la Procesión de los Pasos, la mañana de Viernes Santo. Los motivos vegetales son cardos interpretados a partir de modelos naturales de la vega leonesa. 

Detalles de algunos cardos bordados
Imagen de un cardo con algunos detalles de determinadas zonas del mismo. 

Flor de lis de cinco puntas, con detalle de la punta y nervaduras
Flores de cardo. Detalles y apunte previo para su diseño


Detalle de una flor de cardo, del promontorio de la cruz y aspecto final del bordado, sin colocar el Cristo


Imagen final del bordado con y sin el Cristo.
Medallón heráldico para Cristo Crucificado. Colección particular.
Bordado a realce de oro entrefino y sedas sobre terciopelo verde y tisú de plata salmón.
Taller de bordado Hermanos Labanda Urbano. 2012-2013

domingo, 28 de julio de 2013

Caída central delantera y trasera del palio de María Santísima de la Soledad


 Primera fase del bordado de las caídas del palio para María Santísima de la Soledad, de la Real Cofradía de Minerva y Vera+Cruz.


Primer diseño de la caída trasera del palio. Finalmente, y a petición de la Cofradía, se varió el ostensorio central por el escudo de León.  

 Caída central delantera, ya terminada

 Caída central trasera
 Detalle de la delantera, con el escudo de la Real Cofradía

Detalle del escudo de la Cofradía, con la Vera Cruz en la Sagrada Forma, como Sol Radiante. 

 Escudo de León para la caída central trasera




Imagen delantera del palio, con la caída central ya bordada, en procesión.
Gentileza de D. Alvaro Labanda Canal.






Palio de María Santísima de la Soledad. Real Cofradía de Minerva y Vera+Cruz
Bordado en recorte de tisú de plata a tres tonos sobre terciopelo negro.
Taller de bordado Hermanos Labanda Urbano, 2013



miércoles, 20 de marzo de 2013

Manto de procesión de María Santísima de la Soledad. Real Cofradía de Minerva y Vera+Cruz, León


Limpieza de los bordados del Manto de Procesión de María Santísima de la Soledad, de la Real Cofradía de Minerva y Vera+Cruz, León.

Nuestro trabajo ha consistido en la limpieza de los bordados, asi como del terciopelo negro de soporte y de la doble pasamanería que rodea el mismo. En la boca del manto no se ha podido restaurar el encaje de plata, por lo que se ha sustituido por un encaje de conchas de hojilla en plata. Igualmente se ha sustituido el forro antiguo por uno nuevo de seda en color negro. 

El manto fue bordado en el Monasterio de San Miguel de Las Dueñas, en León, estrenándose en la Semana Santa de 1947. Desde entonces no ha sido objeto de ninguna intervención de conservación, manteniendose hasta el momento actual en muy buen estado, y precisando solamente la restauración de la doble pasamanería en algunos puntos, y la limpieza de los bordados y del terciopelo. 

El diseño presenta el escudo de la Cofradía en el centro, con los  Atributos de la Pasión en la zona delantera del mismo rodeados por hojarascas en plata cerrando la cola del manto la Columna de la Flagelación, con diversos motivos vegetales. Finalmente el manto está salpicado por multiud de pequeñas flores de cinco y seis puntas. 

En cuanto a los bordados, están realizados en recorte de plata y canutillo de plata, con algunas de las flores que salpican el manto bordadas en camaraña de plata. ELas piezas de recorte presentan alguna peculiardad, como es el que algunas de ellas están matizadas con óleo para darles tonos rosados. El canutillo está realizado con gran limpieza, consiguiendo bellos efectos geométricos en todas las piezas.

Se ha procedido a un cepillado previo de todo el manto para eliminar el polvo e impurezas que pudiesen estar presentes, para a continuación proceder a la limpieza de los hilos de plata, devolviendo a los mismos parte de su brillo original. 

A continuacion presentamos fotografías del manto antes y despues de la restauración, asi como la memoria que se ha publicado en la revista editada por la Cofradía en los días próximos a la Semana Santa. 



Cruz, antes de la limpieza

Cruz, después de la limpieza














marcas de talco en una parte del manto, descubiertas durante los trabajos de limpieza. Ver artículo al final de la entrada


 





El manto inacabado de la Virgen Guapa
Hermanos Labanda Urbano (publicado en la revista de la R.C. de Minerva y Vera+Cruz, 2013)

En los días previos a la Semana Santa de 1947 se presentaba en León el nuevo manto con el que la Cofradía de Minerva y Veracruz completaba el ajuar de Nuestra Señora de la Soledad. La prensa local se hacia eco de la noticia describiendo en reseñas y artículos detalladamente la obra, tal y como reflejamos a continuación en este recorte de una edición de Proa. (Proa, 18-3-1947, p. 2)

"El domingo admiraron los cofrades de la Minerva el hermoso manto negro, de terciopelo, que regala a la Virgen de la Soledad, de San Martín, que sale en la Procesión del Santo Entierro, la familia Arriola. Está bordado en plata por monjas de San Miguel de las Dueñas y es una obra finísima.
En el centro lleva el escudo de la Cofradía de la Minerva, cuyo cáliz es una preciosidad en oro y plata bordado, habiendo añadido al escudo unas estrellas de plata que no figuran en él, pero adornan. Bajo el escudo va la corona de espinas de tres clavos. Más abajo, cerca de la orla, la columna y los azotes. En la caída de la parte delantera en los ángulos está bordada a la derecha la cruz y a la izquierda las escaleras y otros atributos de la Pasión. Diversos adornos de flores sobriamente distribuidos dan un efecto artístico. El manto va tachonado de estrellas en plata".

La Soledad cambiaba de esta forma su primer manto procesional, que había sido confeccionado por algunas de las mujeres de los seises de la junta, y donado por ellas a la Virgen. El manto de 1947, donado por la familia Arriola, la gran impulsora del paso de palio de Minerva en sus inicios, ha llegado a nuestros días en un impecable estado de conservación, pudiendo solo encontrar en él algunos efectos producidos por el paso del tiempo y el desgaste propio de una obra que está dedicada a procesionar.

El manto está confeccionado en terciopelo de seda color negro y bordado en plata. El diseño corresponde al estilo romántico de finales del S XIX. Este punto es llamativo, ya que la obra se entregó en 1947. La técnica del bordado, recorte de tisú en plata con matizados en canutillo de plata es también mas propia de finales del siglo XIX que de mediados del siglo XX. Esta técnica, de ejecución sencilla pero muy efectista tiene otros buenos exponentes en la ciudad de León, como puede ser el paño de altar de la capilla del Cristo de la Victoria, y fuera de ella, como la saya de procesión de la Soledad de San Frontis, en Zamora. La técnica se hizo popular en el siglo XIX en algunos talleres catalanes que preparaban vestiduras bordadas en canutillo para imágenes normalmente marianas de pequeño tamaño conocidas como de Cap i Pota, por tener solamente tallados la cabeza, manos y pies, y que eran adquiridas por familias adineradas para devoción particular. Posteriormente y en relación con algunas imágenes de vestir realizadas por los talleres de Olot, la técnica se sobredimensionó para hacer bordados para imágenes de tamaño natural. Debido a su menor coste económico, y a la mayor sencillez de la técnica este tipo de bordados se popularizó sobre todo en la mitad norte de España, donde la dotación económica de las cofradías era más escasa.

En el caso concreto del manto de la Soledad de Minerva y Veracruz, aparecen en los bordados algunas peculiaridades que hacen del taller de San Miguel de las Dueñas un diestro exponente del bordado en la provincia de León por su ejecución. Así, la forma de dar textura a los pétalos de algunas flores con complicados motivos geométricos en canutillo, o la curiosidad de que algunas flores presenten un leve tono rosa llevado a cabo con óleo sobre el tisú de plata confieren al manto una calidad y una importancia que pasa desapercibida. Igualmente es reseñable el cáliz que figura en el emblema. Es la única pieza bordada sobre tisú de oro, y presenta sobre él otro derroche de imaginación en el salpicado de canutillo de plata que lo matiza.
Pero si los bordados son de gran calidad en su ejecución, también lo es la pasamanería de plata que rodea el manto. Realizada en material de primera calidad, consiste en un juego de bucles dobles realizados en plata fina mate y brillante. Esta pasamanería se dispone perimetralmente, en dos franjas concéntricas que dirigen la atención del observador hacia el centro del manto, donde está el escudo de la Cofradía.

Los trabajos que se han llevado a cabo consisten en la limpieza general del terciopelo, que presentaba algunas salpicaduras de cera que se han retirado, principalmente en la parte delantera; la limpieza de todo el bordado, extrayendo de él el polvo y la suciedad acumulada, para devolverle parte del brillo que tuvo inicialmente; y la limpieza y restauración de la pasamanería de plata en aquellos lugares en que presentaba desperfectos. Posteriormente se le ha retirado el forro original que tenía, cambiándolo por uno de seda color negro.

Pero quizá el dato más llamativo en referencia al manto de la Soledad de Minerva es el que a continuación detallamos. Durante el tiempo que han durado las labores de limpieza, y gracias a la observación detallada del manto, hemos encontrado un interesante hallazgo del que nadie nos ha podido dar razón alguna, ni en la Cofradía, ni en los artículos de prensa de la época que se nos han facilitado. En las caídas delanteras del manto se ha identificado una serie de punteados indelebles con forma de pequeños ramilletes de flores, simétricos en ambos lados del manto. Este tipo de señales son las que se emplean en el montaje de las piezas bordadas en el terciopelo. La razón por la que pueden estar presentes estas señales no se nos ha especificado. Puede ser que por una falta de presupuesto no se completase el bordado del diseño entero del manto. Esto parece poco probable, ya que de ser así, se habrían retirado estos elementos bordados antes de pasar al terciopelo, y no figurarían las marcas. Otra opción que parece más plausible es que por una falta de tiempo quedase pendiente para después de la Semana Santa de 1947 terminar de montar las últimas piezas del manto, y finalmente, por diversas razones, no se finalizara, ya que la ausencia de esas piezas no produce vacíos importantes en el manto. En este punto solamente podemos hacer conjeturas de lo que ha podido ser, ya que no hay ninguna documentación al respecto.

A modo de conclusión, estamos ante una pieza bordada que ha pasado desapercibida quizá por la tendencia que tiene la Semana Santa de León a centrarse en los pasos de misterio mas que en los palios, o quizá por que sale en procesión solamente cada dos años, pero en la que esta circunstancia ha permitido que llegue a nuestros días en muy buen estado de conservación. Es un manto que ha sido testigo de excepción de una época pasada, y que debe ser considerado como una pieza relevante dentro del patrimonio textil de la Cofradía y de la Semana Santa de León.